domingo, 6 de septiembre de 2015

PREVIO AL ANÁLISIS DE "EL HOMBRE BICENTENARIO"

El cerebro es una máquina, entonces potencialmente puede ser construido? Esta es una de las claves que impulsan el avance de la Inteligencia Artificial, que busca imitar los procesos de la mente e incluso…SUPERARLOS!

Esta obra nos muestra un Andrew desde el núcleo familiar, conformada por “el señor”, “la señora”, “la señorita” y la “niña” (como el amablemente los llamaba); para servir de  aparato doméstico. Basando su conducta en las tres leyes robóticas que se le implantaron desde su creación. Causando al principio cierta desconfianza y temor por todos los miembros de la familia en especial por las más pequeñas la “señorita” y la “niña”; pero que con el pasar del tiempo va logrando  acoplarse  a la rutina de dicha familia.

En ese día a día junto a la familia Martin, Andrew va desarrollando sentimientos que son muy nuevos para él, como el cariño por las más pequeñas de la casa; reflejado cuando con un simple trozo de madera Andrew talla un caballito para la más pequeña de la casa, quien muy emocionada se lo enseña a su papá,  el cual se asombra al ver que su robot comienza a desarrollar esta habilidad y más aún que este mismo es quien le dice que disfruta hacer eso. Es así como Andrew comienza a tallar más y más adornitos tan hermosos y al mismo tiempo sorprendentes; los cuales son vendidos para solventar  en un futuro desperfectos de si mismo.

Y así sucedió conforme pasó el tiempo la tecnología fue innovando y cada vez los robots eran más sofisticados pero Andrew no tenía nada que envidiarles puesto que él también actualizo cada una de sus piezas, pero este tenía un plus que no tenían los demás robots, ellos no eran versátiles, sino que solo cumplían con la función para la que fueron creados y nada más.

Pasaron los años el Señor Martin envejeció, pero Andrew se mantenía tal cual,  los miembros la señora pasó a vivir a Europa, la señorita era poeta en New York y la Niña se había casado y ya tenía un hijo al cual Andrew llamo Señorito; con la llegada del señorito Andrew comprendió que el Señor  ya no se sentiría tan solo y decidió pedirle su libertad; y como tenia ahorrado una buena cantidad quiso dárselo a cambio de su tan ansiada libertad. Mas el señor Martin no acepto, por lo que la Niña tuvo que intervenir y explicarle que era prudente que le diese su libertad puesto que Andrew no era un simple robot común y corriente sino que había adquirido la capacidad de “sentir” y “reaccionar” como las de un ser humano; pero el señor Martin aún exasperado se negó rotundamente.

Así que esto fue llevado a un tribunal, en el cual muchos se opusieron puesto que la palabra “libertad” solo era apta para un ser humano más no para un robot; mas fue Andrew mismo quien optó por explicar al juez el verdadero  significado,  importancia y deseo de ser libre; al oír tal alegato el juez comprendió  que no había por qué negarle libertad a un objeto tan avanzado y que desea serlo. Así que le concedió su tan ansiado anhelo.

Desde entonces Andrew vivió en una casa que el mismo construyó y comenzó a trabajar mucho más para solventar cada uno de sus gastos, como lo hacía alguien libre.

Pasado el tiempo luego de fallecer el señor Martin; Andrew comenzó a usar ropa que le había dado el señorito, al cual ahora llamaba por su nombre real “George”, quien estaba  casado y era abogado en la firma de Feingold. Fue así como Andrew comenzó poco a  poco a acoplarse al mundo humano, ya contaba con un guardarropa, pero aún había mucho que hacer, veía que había muchas palabras que aún no comprendía así que decidió informarse más, y fue  buscar la biblioteca de aquel lugar; en el camino se perdió y dos  muchachos comenzaron a  mofarse y a darle ordenes innecesarias, cuando estaban a punto de conseguir desmembrarlo apareció George y lo rescato de aquellos pillos, para luego llevárselo a casa.

La niña ya bordeaba los 83 años, pero aún tenía mucha energía, y al escuchar lo ocurrido se enfureció tremendamente, así que pidió a su hijo George encargarse de luchar por una ley que haga valer y contenga el derecho de los robots, para la protección de los mismos  contra tantos rufianes que quieran maltratarlos. Es así como George se encarga de ello con la ayuda de su hijo Paul, un joven abogado de la misma firma. Después de una ardua batalla en el juzgado y en la tribuna pública, por fin el arduo esfuerzo dio sus frutos, la legislatura decidió aprobar una ley que prohibía las órdenes lesivas para los robots; la cual se aprobó mundialmente el mismo día de la muerte de la niña, quien falleció dando una  tierna sonrisa a su tan querido Andrew expresando el agradecimiento infinito por todo aquel tiempo a su lado.  
    
Andrew decide escribir un libro sobre la Historia y vida  de los robots, para luego poder venderlos y con el dinero solventar sus gastos como cualquier humano lo haría. Así que va donde Paul Martin para que le ayude a conseguir una entrevista con el  Presidente de Robots y Hombres Mecánicos, lo cual no resulto nada fácil, hasta que Paul  consiguió la ansiada entrevista con  Harley Smythe-Robertson. Harles los recibió con mucha hostilidad, a lo que tanto Andrew como Paul de la manera más cordial sobrellevaban. Andrew le explico que el motivo de su visita era sus ansias obtener un reemplazo, en este caso sería cambiar de cuerpo totalmente, puesto que el actual ya tenía más de 25 años, y como él era su propio dueño absoluto, le era imprescindible renovarse todo el, a excepción del cerebro; pero al enterarse que ya se había creado en aquella compañía un androide (robots con apariencia humana incluida la textura de la piel) quiso ser uno así, más Harley se negó rotundamente; así que Paul explico que Andrew era libre de decidir puesto que era dueño de sí mismo y lo amparaban la ley que rige  los derechos de los robots; en vista que la misma compañía había concedido el reemplazo de cualquier robot pasado los 25 años, era razonable concederle dicha petición.
Luego de un momento tenso de intercambio de opiniones, entre alegatos y supuestos de juicio, Harles acepto el ansiado pedido de Andrew. Fue así como se dio la esperada transformación de Andrew.

 Andrew se miraba con asombro, al mismo tiempo que con  alegría, ahora ya podría ponerse ropa y caminar tranquilamente sin que nadie voltease a verlo como algo raro, se sentía tan bien que decidió estudiar robobiología; puesto que ya sabía mucho de su cerebro, y  ahora quería estudiar su cuerpo, por lo que pasó mucho tiempo dedicándose de lleno a ello.

Pasado el tiempo Andrew se encontró con Paul quien ya con cierta edad avanzada había decidido dejarle todo el fondo de dinero ahorrado de la empresa de los Martin, puesto que era el último de ellos. Entre tanto Andrew le comento los avanzados estudios que había hecho todo ese tiempo de lograr encontrar una manera más humana en la que los robots puedan respirar y comer, lo cual dejó algo perplejo a un ya anciano Paul.
Andrew consiguió dar un paso más en la ciencia, pero no pasó mucho para que con ello llegase también la muerte del último de los Martin, Paul. Quedando así el aún más vulnerable a un mundo lleno de hostilidad, y con la fortaleza y firme convicción de seguir concretando sus sueños; pero no estaba solo aún tenía el respaldo de la empresa Feingold y Martin de la cual Andrew recibía una generosa comisión anual y era partícipe.
Así que decidió volver a la antigua empresa que lo creó, Robots y Hombres, Mecánicos, todo había cambiado su planta de producción se había desplazado a una gran estación espacial y junto con ella se llevaron muchos robots; allí encontró al nuevo director Alvin Magdescu  quien lo recibió muy amablemente. Andrew pasó a explicarle que el motivo de su visita era el de poder ser aún menos robot, y ahora deseaba una fuente orgánica de energía, para lo que quería una nueva reconstrucción por medio de prótesis más humanas las cuales en un futuro sirviesen a los seres humanos; Alvin lo pensó y la idea  le resultó razonable

Y Así ocurrió, pero Andrew aún continuó en su afán por ser cada día más humano, desarrollando un dispositivo que le permitiese ingerir alimentos sólidos y desechar los no indigeribles; con ello llegaban los reconocimientos por sus grandes inventos protésicos  y la creación de una nueva ciencia a la que denominó protetología; la cual fue de gran ayuda, como lo demostró Alvin quien a sus 94 años llevaba consigo prótesis que cumplían la función de hígado y riñones.

 Andrew se había trasladado  a la Luna para seguir con sus estudios de adaptaciones, donde ya se había implantado un mundo que albergaba una densa población en sus ciudades subterráneas, donde los robots lo tratan con el respeto que se le debe tratar a un ser humano. Pasó allí 5 años hasta que decidió retornar a las oficinas de Feingold y Martin para acercarse al nuevo director Simon deLong y referirle lo vivido en la Luna alegando si allí lo trataban como a un ser humano, pues por qué no serlo?; mas Simon le dijo que eso no era posible puesto que se necesitaría de una Ley de Legislatura Mundial; Andrew algo mortificado dejó en sus manos  concretar una reunión con la Presidenta de la Comisión para Ciencia Chee Li-Hsing y Tecnología para tratar este asunto.

La reunión se dio, Chee Li-Hsing entendió el punto de vista y la posición que Andrew quería tener frente al mundo, mas esta era complicada puesto que aprobar una ley declarándolo humano, iba a traer sus consecuencias ya que así como había gente que tenía aceptación de la misma manera habían otros tantos a los que esta idea les resultaba descabellada; los cuales harían hasta lo imposible para que  eso no se diese al punto de crear una campaña sucia en su contra y desprestigiar sus fines. Más Andrew resto importancia a ello y decidió continuar en su lucha muy al margen de las consecuencias, lo que Chee Li-Hsing acepto apoyar siempre y cuando esto no amenace su futuro político.

Tanto Andrew como la firma Feingold Y Martin comenzaron una lucha en los tribunales que duro muchos años; entre alegatos y más alegatos, se perdía pero también se apelaba; la batalla en los tribunales era ardua puesto que tenían que luchar ya que  la gran mayoría de diputados estaban en contra. La diputada Chee Li-Hsing veía cada vez más lejana una victoria, puesto que ya habían agotado todos los recursos y aunque ganaron unos cuantos a su favor, todavía eran muchos más en contra los cuales alegaban el tema de la diferencia entre un cerebro humano y uno robótico, y era casi imposible hacerles cambiar de parecer.
Más Andrew descubrió que el verdadero motivo por el cual no querían aceptarlo, era porque no les era razonable la existencia de un ser humano inmortal. Así que decidió a escondidas de todos hacerse una nueva operación pero está ves había reorganizado las conexiones de su cerebro de  tal modo que lentamente sus sendas pierdan potencial; lo cual lo haría durar un año más; aunque esto violase la tercera ley (un robot debe proteger su propia existencia).

Este actuar de Andrew de desprenderse de su propia existencia con el fin de cumplir su tan anhelado sueño, fue lo que impactó en toda la humanidad, fue así como en la ceremonia final del segundo centenario el presidente mundial declaró a Andrew como El Hombre Bicentenario, hecho que fue de gran precedente mundial.

El poco tiempo que le quedaba avanzo muy rápido. Andrew yacía en su lecho esperando el final. Después de tanto luchar por ser lo  que ahora era, su sueño hecho realidad, un ser humano, se sentía satisfecho de todo lo que había logrado para consigo mismo, como para la ciencia y la humanidad. Antes de dejar este mundo dijo en voz casi entrecortada “Niña”, recordando a la más pequeña de los Martin que fue su gran impulso para comenzar con toda aquella lucha para lograr este tan anhelado sueño.








7 comentarios:

  1. Interesante apreciación de este libro, algún día seremos reemplazados por las máquinas?

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  2. Una muy interesante critica, este libro es bastante interesante ya que como tu bien dijiste trata temas futuristas y al mismo tiempo problemas inherentes de la humanidad como especie.

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  3. Muy Interesante apreciación de este libro de Issac Asimov, donde vemos reflejado el ímpetu y tenacidad de Andrew en la lucha por su objetivo principal de ser reconocido como humano.

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  4. Buena historia que en un futuro sera realidad.

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  5. Interesante Libro :) ....Era una situación descabellada pensar antes; que la vida eterna pueda existir. en esos tiempos donde aun la tecnología despertaba y daba grandes pasos seguidos de una humanidad que anhelaba; cada vez hacer menos trabajos y desempeñar menos esfuerzos físicos, la tecnología de ahora y la de antes, una comparación y grande diferencia, de los sueños y la imaginación a una realidad y cada vez mas latente está al día..

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  6. Muy buena critica, debemos hacer tal y como Andrew no rendirnos y persistir siempre para alcanzar nuestras metas y objetivos. Muy buen aporte !!!

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